El terremoto que tuvo lugar en Lorca el 11 de mayo de 2011 ha contribuido a poner de manifiesto ciertos aspectos de la idiosincrasia lorquina y además ha provocado la aparición de otros nuevos:
usuarios-arquitectos.- por un lado ha convertido a todos los habitantes en arquitectos, en especialistas en arquitectura; puedes escucharlos hablar como arquitectos, mirar a los edificios como arquitectos, con un lenguaje técnico específico (empleando términos como «pilares enanos, losas de cimentación, cabezas, torsión de los soportes, cizalla, pretil, colapso, encuentro», etc. ) referido a cuestiones mecánicas y estructurales y a la vez combinado con experiencias emocionales propias acerca de los espacios que habitan. Cumplen así con el objetivo de múltiples planteamientos de la arquitectura contemporánea que entienden el diseño y construcción de una vivienda como el resultado de un proceso participativo en el que el cliente es uno más de los agentes que intervienen en la red, que también involucra al arquitecto, por ejemplo, y a los albañiles, y a los vecinos e incluso a organismos públicos.
Este hecho tiene una causa inmediata (de consecuencias imprevisibles) y es que hay que tener en cuenta la forma en la que los lorquinos han adquirido este discurso (en muchos casos fue el resultado de conversaciones con los equipos técnicos que los primeros días recorrieron deprisa las calles, marcando con colores todos los edificios dañados y en donde salieron a relucir intereses particulares en el uso de este lenguaje) y el momento en que lo interiorizaron, marcado por el desconcierto general de los instantes posteriores al terremoto.
Sin embargo, comienza a existir entre los niños un impulso, una tendencia a emular, a querer ser de mayores como los personajes que fueron a sus casas en esos momentos y les tranquilizaron diagnosticando las patologías de sus vivendas o facilitando las tareas burocráticas e informando de las posibles formas de reconstruirlas, por lo que puede que nos encontremos ante el germen de una futura generación de arquitectos surgida de de la conversación y la colaboración ciudadana.
realojamiento diferencial.- por otro lado ha permitido sacar a la luz multitud de datos acerca de la disponibilidad de una vivienda o capacidad de realojamiento de los habitantes de la ciudad y, como consecuencia, ha permitido establecer unos niveles de acceso a las éstas que, utilizando dos ejemplos significativos, van desde situaciones en las que los propietarios se encontraban rápidamente establecidos en sus segundas residencias (principalmente en lugares de costa) mientras se llevan a cabo las reformas en sus viviendas habituales hasta casas de campo que están siendo habitadas simultáneamente por varias familias al haber vuelto a ella los hijos y las hijas independizadas y casadas y con susnuevas familias al completo.
Esta diferencia se acentúa a la hora de solicitar las ayudas para la reconstrucción de las viviendas, pues las viviendas de una mayor superficie normalmente coinciden con una póliza de seguro más amplia y con una cobertura mayor, mientras que las viviendas con una póliza menor o sin asegurar dependen de la ayuda que el Consorcio de Compensación de Seguros preste a la comunidad de propietarios y la forma en que ésta se reparta o de las ayudas de la Comunidad Autónoma que aún no han comenzado a distribuirse. De esta manera se perpetúa el estado establecido (…)
nuevas conversaciones.- también pueden observarse grupos, corrillos de personas en los portales de sus edificios, en los solares de lo que una vez fueron sus bloques de viviendas, en los parques y en las plazas, quienes, mediante reuniones periódicas, mantienen conversaciones para llegar a acuerdos sobre la manera de reconstruir o rehabilitar sus casas para que exista un mayor beneficio común. Se favorece así la aparición y consolidación estructuras vecinales que puedan desembocar en oportunidades de colaboración, formas de cooperación, etc. a la hora de la reconstrucción de los inmuebles demolidos.
Mientras siguen las demoliciones en Lorca y aRRs a!, mediante diversas acciones de registro y edición, colaboración, cooperación y, puntualmente, de reconstrucción, continuará promoviendo, organizando y participando en la evolución de de esta reconstrucción social.