El desarrollo del Sistema Dinamo avanza poco a poco, para agilizarlo introducimos un nuevo marco de trabajo para tratar con los clientes que se interesan por él. La idea: tener un «procedure» que permita avanzar el proyecto compartiendo los riesgos de experimentación con los «usuarios pioneros», a los que queremos ofrecerles un «sistema operativo» alternativo a la forma convencional de construir los edificios.
Primero los avances del proyecto: al final del verano realizamos (casi) todas las obras «previas» que harán que podamos empezar a trabajar en el Laboratorio de Campo (LdC) como lugar de experimentación y prototipos. Y de hecho, ya está en marcha nuestro primer molde para hacer adobes y restaurar algunos muros del propio LdC para que actúen como captadores de inercia térmica, además de los materiales para hacer un primer prototipo de calefacción radiante con biomasa.
En la wiki, Alfonso va organizando los dispositivos según los recursos que se transforman y, poco a poco, vamos editando las definiciones que sustentan el proyecto. Nuestro referente es el espacio de trabajo de OSE y en el horizonte la posibilidad de construir una Comunidad de Desarrollo global en torno a la idea de habitabilidad mediante dispositivos transformadores de recursos. En nuestros otros proyectos también vamos construyendo argumentos que informen y referencien esta idea, como el artículo en mimbrea sobre formas de calefacción alternativas, que reflexionaba sobre el trabajo de P. Rahm reorganizando la vivienda según los gradientes de temperatura.
A pesar de todo este trabajo, vamos más lentos de lo que nos gustaría y, en nuestras circunstancias, sospechamos que el despegue del Sistema Dinamo necesita de alicientes. Éstos pueden venir de la Comunidad de Desarrollo o, más probablemente, de que tengamos clientes dispuestos a probar algunos prototipos. Esto último parece que puede ocurrir en breve y ya hemos tenido conversaciones con algunos.
Tanto en el «enrolamiento» de hackers de la construcción del entorno en la Comunidad de Desarrollo como en el trabajo con clientes, nos gustaría tener «trabajo hecho» que demuestre la viabilidad del proyecto. Que emocione e ilusione, pero también que dé ciertas garantías. Pero aún no es así. Así que en nuestras conversaciones hemos llegado a la conclusión de que hay que empezar a tomar riesgos. Nosotros y nuestros clientes con restricciones presupuestarias pero ganas de experimentar. Porque si algo ofrece el Sistema Dinamo, es la posibilidad de reducir los costes en la construcción (a través de la implicación del cliente o los hackers y por estar desarrollada en Modo P2P) y el mantenimiento. E incluso, la posibilidad de abrir nuevas fuentes de ingresos, pero eso lo contamos otro día.
Así es como en aRRsa! vamos a empezar el arranque dual que comentábamos hace poco en la blogosfera. Remezclando palabras indianas: frente al modelo existente «basado en las grandes escalas», el Sistema Dinamo es parte de «una economía productiva alimentada por las redes distribuidas, las tecnologías de alcance, el conocimiento libre y el cambio cultural.»
Nuestra idea es poder ofrecer a nuestros clientes otro «sistema operativo» con el que enfrentarse a la construcción, rehabilitación o mantenimiento de un edificio. En la actualidad y en nuestro entorno, la mayoría de gente trata los edificios como una inversión inmobiliaria y, en el mejor de los casos, son conscientes de que, así tratados, son más bien un gasto como pueda serlo la ropa. Con el Sistema Dinamo en cambio, partimos de que un edificio es algo sobre lo que trabajar y obtener rendimiento. Si me permitís el chiste arquitectónico, el sistema operativo convencional sigue con el mito de «la primera cabaña», y la construcción del Sistema Dinamo se parece más a las modificaciones que los cazadores-recolectores hacen en su entorno para beneficio propio. Cada uno de los elementos que conforman un edificio está modificando los flujos de energía y recuros y puede, por tanto, aprovecharlos.
Que aún es una virtualización, sí. Pero queremos entrar ya en acción y para ellos estamos desarrollando un marco de trabajo con clientes para el Sistema Dinamo parecido al que tenemos para las Consultas de Arquitectura (heredado de R. Livingston). A continuación, las bases del procedure: (para otros posts dejaremos las bases en las que se asienta el Sistema Dinamo (prototipado rápido, hardware libre, el paradigma termodinámico) y las bases de la participación en la Comunidad de Desarrollo):
En las Consultas los «movimientos» diferenciales que hacen exitoso al Método son: el pacto, la escucha, la generación de posibilidades y el desarrollo de un lenguaje común con el cliente. Recuperamos estos éxitos para el trabajo con el Sistema Dinamo, pero habrá que añadir otros o matizar.
Por ejemplo, en el pacto aclararemos qué aporta el cliente y qué aportamos nosotros y debe incluir el acuerdo sobre el riesgo y la experimentación. ¿Participarán los propietarios en la construcción? Si no, ¿están dispuestos a que se realicen talleres o primeros prototipos con su vivenda? ¿Tienen recursos para contratar empresas externas?. Todo esto se hablaría en la primera entrevista. Por ahora, hemos previsto 4 escenarios:
– El cliente como autoconstructor y aRRsa! como asesoría técnica.
– El cliente y aRRsa! como constructores (con la posibilidad o no de contratar empresas externas para algunas partes de la construcción) y aRRsa! como asesoría técnica
– El cliente como contructor aficionado y aRRsa! como constructores (también con la posibilidad de empresas externas) y asesoría técnica
– aRRsa! como constructor que toma el proyecto del cliente como uno de sus Laboratorios de Experimentación.
En el planteamiento de estos escenarios nos hemos alejado de las clasificaciones existentes sobre autoconstrucción (ver la Habitapedia de lapanadería) porque éstas se centran en la vivienda y la entienden como un objeto completo (aunque se desarrolle en varias fases). En cambio, el Sistema Dinamo propone unos dispositivos muebles que hacen los lugares más habitables aprovechando los recursos.
Para decidir sobre un escenario u otro necesitaremos conversar sobre las «capacidades tecnológicas» de los clientes (un concepto sobre el que ya hemos trabajado anteriormente). Las capacidades actuales y las que están dispuestos a desarrollar. Esto supone mostrar a los clientes los sistemas constructivos que les permiten involucrarse en la construcción, el lenguaje común ya no servirá solamente para las decisiones sobre distribuciones y acabados sino para las decisiones constructivas (algo que ya venía pasando en algunas consultas). Para ello en aRRsa! catalogaremos los Dinamos incluyendo sus dependencias (materiales, habilidadades, maquinaria que hacen falta para usarlo y en qué «paisaje» funciona preferentemente). Por otro lado, la labor de divulgación que hacemos en mimbrea sirve como introducción a algunos sistemas). Y, cómo no, habrá que empezar a plantearse la formación mediante talleres o encuentros.
En las entrevistas no sólo preguntaremos sobre las necesidades y deseos de habitabilidad, también enfrentaremos al cliente con los mínimos habitables. Para ello estamos desarrollando formas de conseguir que los clientes prioricen y decidan en qué invertir su primer capital (que, como decíamos, en estos clientes puede ser reducido). Será complicado al principio porque, como decimos, el Sistema Dinamo aún es experimental pero, conforme vayamos desarrollando y probando prototipos, las posibilidades y certezas se ampliarán. Con ello, iremos decidiendo sobre el plan de obra.
Por tanto, el calendario o plan de obra y los presupuestos ya no aparecerán al final de la Consulta, sino al principio. Como un documento flexible, que siga la lógica del «construir constryendo». Para uno de los potenciales clientes ya desarrollamos un documento así en el estudio previo. Lo tomaremos como modelo aunque, en su caso, era bastante complejo porque su idea es que el Sistema no sea sólo una vivienda sino una posible fuente de ingresos, como Casa rural o como centro de trabajo. Mezclamos el plan de obra con las actividades y el presupuesto con los posibles beneficios de las actividades, y todos entre ellos :). En el caso de los presupuestos hay que tener en cuenta que los prototipos menos desarrollados son difíciles de presupuestar ajustadamente. Y aquí entra la idea de «riesgo compartido», en aRRsa! estaremos dispuestos a tener menos beneficios cuanto mayor sea el grado de experimentación.
Finalmente, la generación de posibilidades dependerá de todo lo anterior. Es decir, las variantes de tipologías y distribuciones de espacios dependerán de los Dinamos que se vayan a construir y en qué fase. Parece que lo lógico es que aparezcan después de todo el trabajo anterior, pero no creo que sea así. Normalmente las personas necesitamos visualizar los espacios y las distribuciones para poder tomar decisiones y, porqué no decirlo, para ilusionarnos con el proyecto. Lo que sí sería conveniente es que las decisiones de distribución se tomarán después.
Con todo esto, hemos conseguido que todos los documentos de trabajo se mezclen unos con otros y que el marco de trabajo esté mucho menos pautado en las entrevistas. Pero, como hemos llegado a apreciar la tranquilidad que un método pautado da a los clientes (y a nosotros), poco a poco lo iremos perfilando.
Una última cuestión a tratar transeversalmente a las anteriores es la de las normativas y la legalidad de la construcción. En las Consultas actuamos como asesores de los clientes en la toma de decisiones sobre la reforma o construcción de un edificio. Si la propuesta final exige por ley un Proyecto de Ejecución, como arquitectos titulados, ofrecemos a nuestros clientes la posibilidad de redactar el proyecto y tramitarlo. En el Sistema Dinamo esto último no será necesario en la mayoría de casos. Como decíamos, el Sistema Dinamo supone un cambio de paradigma respecto a la idea de construcción de edificios. Se trata de una serie de dispositivos muebles que se instalan para aprovechar los recursos inciden en un lugar. Sin embargo, en muchas ocasiones será necesario hacer un estudio sobre normativa y legalidad según cada país o municipio. Por ejemplo, en una parcela rústica en la que los clientes quieran conectarse a las infreastructuras de agua y luz, o si se quiere conseguir permiso para desarrollar alguna actividad pública que exiga ciertas condiciones de habitabilidad. Por ello incluimos la asesoría legal en este marco de trabajo. Nuestra idea es hacernos especialistas en esta materia y tenemos varios referentes muy interesantes. Soñamos incluso con desarrollar un marco legal para zonas de experimentación constructiva o incluso nuevos modelos de desarrollo territorial basado en el sistema dinamo, por soñar…
Así empieza nuestra aventura como emprendedores artesanos en la construcción dinámica. Animamos a todos los hackers de la construcción del entorno a unirse a la aventura y a soñar con nosotros!
11/18/2012 at 1:16 pm
Con la boca abierta me habeis dejado. Un post para leer y releer ¡Sí señor!
¡Un saludo y mucho ánimo!
11/20/2012 at 1:03 pm
Gracias!! Pero… mucho ánimo no, ¿te animas a desarrollar con nosotros?
Hem vist en el teu blog que saps de Electrònica i Automàtica.. seria perfecte! Qué dius?
11/20/2012 at 10:53 pm
M’agradaria molt! Però ara no tinc massa temps, de tota manera vos seguixc i contribuiré en tot el que puga.
Estem en contacte!
11/21/2012 at 8:07 am
Molt bé! Ací estem per a qualsevol comentari sobre el que aniguem desenvolupant. I en començar a formar la «Comunidad de desarrollo» contem amb tu (cadascú per supost amb el temps que tinga). Abraç!